dilluns, 15 de febrer del 2021

CONTES AMB ARRELS MATEMÀTIQUES

La proposta és presentar una estructura de conte i un conte d'exemple per poder construir contes amb inspiració d'alguna situació matemàtica, per facilitar la recerca de situacions quotidianes on s'utilitzin notacions, situacions o problemes matemàtics.

Primer s'haurà d'analitzar el conte amb la plantilla per construir contes i desprès utilitzar la plantilla per fer el guió del conte propi, que es pot construir sols o en parelles. Pot estar basat en situacions de la vida real dels alumnes.

Aqui van la plantilla i el conte d'exemple:

CONSTRUIR UN CONTE

 

TITOL

 

 

 

PLANTEJAMENT: COM COMENÇA?

 

Qui és el/la protagonista?          (Descripció del personatge)

 

 

Com és?            

 

 

On viu?            

 

 

Què fa?

 

 

Altres personatges...

 

 

 

NUS:QUÈ PASSA?

 

Quin problema?                            On passa?                                Quan passa?

 

 

 

 

DESENLLAÇ: COM ACABA?

 

                                               

Com es soluciona el problema?                          

 

 

 

 

 

EL NIÑO PRODIGIO

Juan era un niño de tres años y medio que vivía en una choza de paja en el Perú. Tenía dos hermanos mayores: Alba de 8 y Rodrigo de 15 años. Alba y Rodrigo iban al colegio, que estaba muy lejos, en barca, atravesando el lago Titicaca. Juan los veía irse cada día con mucha alegría y volver con sus cuadernos llenos de números, palabras y dibujos. Pero a él solo le interesaban los números. A pesar de su corta edad, Juan ya sabía muchos números, sumar, restar, multiplicar y calcular mentalmente incluso con números decimales.

Su papá, cuando miraba el fútbol por la tele, siempre le preguntaba:
-          ¿Cuánto falta para la media parte?, ¿Y para el final del partido?-       Y Juan le decía:
-          Faltan doce minutos y medio para la media parte y _______________________ para el final...etc.
Un día los tres hermanos fueron a buscar unas llamas de su rebaño para venderlas en el mercado. Cogieron siete llamas y se fueron para allá. Cuando llegaron, Juan se quedó vigilando las llamas y sus hermanos fueron a buscar compradores. Entonces se acercó un señor bajito, con bigote y ojos pequeños y maliciosos, que le dijo a Juan:
-          ¡Qué llamas más bonitas! ¡Y hay muchas! Te doy veinte pesos por cada una.
-          De acuerdo - , dijo Juan.
Entonces el hombre le dio el dinero y, pensando que un niño tan pequeño no sabría contar mucho, intento estafarlo: le dio 120 pesos.
-¡Señor! -, gritó Juan - ¡Aquí falta dinero!
El señor comenzó a correr por la calle pero los hermanos de Juan, Alba y Rodrigo, oyeron los gritos de Juan y acudieron rápido, persiguieron al estafador y lo llevaron delante de Juan otra vez.
-          Faltan ____ pesos, señor. Soy pequeño pero sé contar y siete por veinte son como siete por dos y un cero, es decir _______ .
A partir de aquel día dejaron ir a Juan al colegio, a aprender y a enseñar lo que sabía hacer.